Te voy a enseñar a construir seguridad desde las bases. Así que déjame tu nombre y tu mail solo si…

Quieres sentirte firme y sólida ante cualquier desafío que atravieses (en el trabajo, en tus relaciones, en tu vida).

Quieres confiar en lo que sientes y piensas sin necesidad de que otros lo confirmen.

Quieres creer en tu criterio sin buscar constantemente que los demás lo validen para estar tranquila.

Quieres decir lo que piensas con claridad sin que te paralice el miedo.

Quieres ser dueña de ti misma en lugar de moldearte para encajar.

Quieres vivir tu vida y no una versión reducida por miedo a incomodar.

Si algo de esto resuena contigo… Necesitas venir a la sesión del lunes, porque allí lo haremos REALIDAD.

Vale, pero… ¿Qué vamos a ver?

Sé que eres la que siempre está ahí para los demás, observando y escuchando. Que te cuesta ser la que habla primero, la que interrumpe o cuenta lo que le pasa, porque es como si molestaras o lo tuyo no fuese tan importante. Y que aunque quieres ocupar tu lugar, te cuesta creer que tú puedas hacerlo, porque en tu realidad parece imposible. Conozco bien lo que no te deja avanzar.

Estoy segura de que dentro de ti hay un verdadero potencial que hasta tú misma puedes sentir. El problema es que no sabe como salir: lleva demasiado tiempo escondido porque toda tu energía ha estado en otra parte: evitando incomodar, asegurándote de que todo está bien o tratando de ser lo que se espera de ti (menos intensa, menos sensible, más fuerte…).

Por eso sé que solo necesitas las 3C’s para cambiarlo

CIMIENTOS

Has probado todo lo que se te ha ocurrido para sentirte diferente: reiki, diseño humano, dieta keto, clases de yoga y hasta coaching para trabajar tu mentalidad. Pero por dentro sigues sintiéndote igual: insegura, dudando de ti. Y como nada funciona, hasta puede que estés pensando que el problema eres tú, que hay algo en ti que no encaja, o que tendrías que esforzarte más.

Llevas todo este tiempo haciéndolo al revés. Empezando por el final. Empujándote a sentir lo que no sientes, aparentando que todo va bien (cuando en realidad no es así), y endureciéndote para cumplir con las expectativas de lo que se espera de ti.

CONSTRUCCIÓN

COMUNICACIÓN

La base que sostiene todo lo demás

Lo que lo hace fuerte y robusto

Lo que permite trasladar lo de dentro hacia afuera

¿No crees que hay mucho que todavía puedes hacer en tus cimientos para que ese potencial por fin pueda salir?

¿No crees que necesitas hacer un trabajo real que no se quede en la superficie donde solo puedes tapar agujeros y poner parches?

¿No crees que es el momento de dar los pasos que has estado evitando pero que te permiten expresarte a ti con verdadera seguridad?

Pues si que quiero las 3C

Quien soy yo para acompañarte en esta reconstrucción

Carmen.

Bienvenida a Vincurando. Un laboratorio en el que creamos las condiciones necesarias para que construir una seguridad verdadera sea algo posible, y además comprobable y sentible.

Tengo una consulta online para personas que como tú, pertenecen a ese 1% que busca responsabilizarse de sus heridas y trata de repararlas para no ir a la deriva. Y que además, creen que una vida significativa es posible.

Por eso Vincurando es un laboratorio vincular. Porque para mi, cualquier proceso de transformación necesita de un espacio en el que creemos una seguridad que nos permita explorar nuestros límites y desarrollar nuestro verdadero potencial.

Con mis más 10 años de formación y experiencia, he podido ser testigo de todo lo que es necesario para que el cambio exista de verdad. Y para que no sea algo a lo que renunciaste porque no encontraste el cómo y tuviste que conformarte con seguir viviendo una vida a medias.

Y si. Lo he visto. Una y otra vez. Personas que no creían que pudiera ser diferente para ellas. Porque parecía impensable. Porque llevaban décadas sintiéndose así. Porque otra realidad no parecía posible. Pero que venían. Que seguían. Que se comprometían. Tal vez porque algún susurro interno creía en algo distinto.

Y lo conseguían. Eso que no creían que podría ser distinto. Eso que era impensable. Eso que estaba tan, tan, tan lejos de su realidad. Porque cuando encuentras lo que siempre necesitaste pero no estaba disponible, lo imposible se hace posible.

Y oye, esas transformaciones que te cuento que he visto, también las he vivido. Yo también he pasado por ellas. Por lo difícil. Por lo duro. Por lo doloroso. Por lo que parecía estar a años luz. Pero ¿Sabes qué? Elegí no escapar de mi. Esa fue mi promesa. La que me trajo aquí. Y la que me permitió comprobar que si. Que existía. Que era posible. Y que era real. También para mi.

Te veo al otro lado, donde construimos la casa en la que vivirás toda tu vida. Ven GRATIS y en DIRECTO.

Si tú también quieres venir conmigo, reserva tu plaza en este evento. Puedes comprobar si lo que te cuento es verdad y si lo que hay dentro es para ti. Y todo lo que vas a recibir (que es dentro un valor incalculable) será totalmente GRATIS.

C. R.

Es muy bonito ver cómo te transformas para ser tú, en lugar de para ser otra. Porque no solo descubres quien eres de verdad, sino que dejas de renunciar a ti. Solo puedo decir que esto ha sido gracias al trabajo con Carmen y un enfoque que no había visto nunca antes y que me ha conectado con mi esencia y con esa parte interna que nos hace ser quienes realmente somos.

La verdad es que lo que me trajo aquí fue mi maternidad y el encuentro con mi propia sombra. Empecé este proceso intentando entender qué fallaba en mi, esforzándome mucho para agradar a los demás, y con el miedo de que esto pudiera afectar a mi hija y a mis relaciones. Venía queriendo cambiarme a mí misma, sin darme cuenta de que lo que realmente necesitaba era encontrarme y respetarme.

Pero desde la primera sesión con Carmen sentí una conexión especial con ella y con su forma de trabajar. Algo en su manera de transmitir me hizo saber que quería vivir este proceso con ella y no me equivoqué.

Al principio no me creía capaz de poner un límite y sostenerlo sin sentir culpa. Y sin duda fue un proceso profundamente transformador. El trabajo desde el cuerpo ha sido todo un descubrimiento y la clave para conectar con mi verdadera esencia.

Hoy puedo marcar límites con claridad y certeza, pero no desde la mente, empujándome a mi misma, sino desde el cuerpo. Lo siento como algo natural y necesario para mi, y los pongo con calma y tranquilidad. He pasado de vivir para los demás, desapareciendo yo, intentando agradar y haciendo la vida más fácil para todos; a recuperar mi energía, mi espacio y mi ser. Ya no me dejo traspasar.

Recomendaría y recomiendo a Carmen siempre que puedo. De verdad que su forma de trabajar ha sido un regalo para el resto de mi vida: aprender a escucharme, regularme y vivir desde mi autenticidad. Así que si alguna vez dudas, hazlo. Volvería a elegirla siempre.

Quienes ya han entrado al laboratorio de Vincurando…

Ojo, las fotos no son reales y los nombres no aparecen para cuidar de la privacidad

A. O.

El otro día en el trabajo dije que no sin poner ninguna excusa, ni tener que explicarme o justificarme. Por primera vez sentí que podía decir no y nada más. Gracias al trabajo con Carmen y con los límites lo que hasta ahora estaba deseando surgir pero no sabía cómo hacerlo, ahora fluye sin esfuerzo.

Hasta ahora suavizaba lo que decía, y me esforzaba mucho por ser amable. A veces haciendo bromas cuando había tensión para que nadie se sintiera incómodo. Y otras veces analizando todo lo que pasaba para ver qué tenía que hacer para corregirlo. Creía que yo en realidad era borde y que tenía que procurar no ser seca o cortante.

Pero conectar con todo lo que hay detrás de ‘poner límites’ ha hecho que pudiera haber una transformación real.

Y sin darme cuenta, me encontré diciendo que no de forma muy natural y fácil. Fue cómodo. Estaba tranquila conmigo misma. Era como que solo podía salir eso. La realidad es que no quería, y pude ser coherente con eso sin tener que forzarme. Ahora tengo la sensación de que nada externo me puede tambalear y me siento puramente yo.

Cuando trabajas los límites así solo puedes sentir seguridad, y eso es algo que no podría haber imaginado. Porque poner límites antes me conectaba con la inseguridad y con estar haciéndolo mal o estar haciendo daño. Pero ahora me siento firme y estable

A. B.

Lo que antes me habría paralizado, me habría hecho pequeña o preferido no molestar, ahora se ha transformado. Poco a poco y casi sin darme cuenta, me encuentro poniendo límites que antes me habrían parecido inimaginables. Gracias al espacio con Carmen he podido explorar y sentirme segura para avanzar a mi ritmo, sin juicios ni presión.

Y es que los límites siempre han sido un gran tema para mí. ¿Cómo iba a ponerlos si ni siquiera estaba en contacto con mis propias necesidades? Crecí sin aprender a reconocerlas. Y cuando intentaba poner un límite, aparecía una voz juiciosa, con dureza y con vergüenza. Otras veces simplemente me congelaba y me paralizaba.

Pero desde el primer momento, el espacio con Carmen me permitió explorar nuevas formas de estar en el vínculo. Sentirme segura para ir expresando lo que necesito ha sido clave en este proceso.

Y aunque no es rápido ni fácil, es profundamente transformador. Ha habido muchas veces en las que me he juzgado por mis propias necesidades o he intentado cambiarlas, pero la forma en la que Carmen las respeta y me sostiene en el vínculo ha cambiado por completo mi sensación de que hay algo mal en mi por necesitar lo que necesito.

He pasado de paralizarme a movilizarme y expresarme. Y lo que antes estaba lleno de vergüenza y de dureza, ahora está lleno de compasión y seguridad para poder sostener el límite. Ya no me congelo ni me hago pequeña. Ya no elijo callar para hacerlo fácil. Ahora puedo vincularme desde mis necesidades, con claridad y seguridad.

Creo que trabajar los límites es sanador, porque todo en la vida es un constante vincularse. Aprender a estar en contacto con tus necesidades y poner límites de forma sana, segura y asertiva es algo absolutamente necesario. Y eso es lo que más agradezco con Carmen.

A. C.

He pasado de sobrevivir a vivir: eso que antes solo podía imaginarme en mi cabeza, ahora lo estoy sintiendo y sé que es real. Y es que gracias a Carmen he dejado de buscar fuera y he empezado a encontrar dentro.

Porque llevaba años apuntándome a cursos, talleres, formaciones… Siempre buscando algo más, sintiendo que nunca era suficiente, que tenía que seguir preparándome. Pero cuanto más hacía, peor y más desconectada me sentía. Y con Carmen me di cuenta de que esa inercia de ‘nunca parar de hacer’ venía del miedo a no ser suficiente y tener que demostrar que estaba a la altura.

Con el tiempo he podido ver que todo lo que necesitaba era dejar de intentar arreglar y atreverme a mirar dentro de mi. Ahora por fin siento que ya estoy lista, que todo estaba dentro, y puedo disfrutar de encontrarme conmigo en un proceso real.

Ven GRATIS y EN DIRECTO. A decir no sin culpa. A ocupar tu lugar sin miedo. Y a construir seguridad REAL.

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